Seguramente en algún lugar habrás leído: sonrie, sonrie...Dios te ama, claro que sí, en internet, en el autobus, en una playera, en un cartel, en la calle, en tv, tal vez esta sea la razón por la que la mayoría al leerla la pasa despercibida
Pero que pasaría si un buen día al despertar a un lado de la almohada encuentras una bella tarjeta que diga: Sonrie todo el día, te amo. y la firma tu esposo (a), pareja, hijo, hermano (a), madre, padre o tu novio (a). Eso te haría sonreir todo el día, tal vez te llevaría hasta las lagrimas tan sólo de ver lo importante que eres para alguien, o lo importante que es tu felicidad para una persona cercana a ti.
Eso me sucedio hace un par de días. Me llegó un mensaje al celular donde decía SONRIE TODO EL DIA. TE AMO. y de pronto todo cambio y hubo una sonrisa, y esa sonrisa se ha prolongado por horas y por días.
Le contesté el mensaje a este ser amado diciéndole que ese mensaje era como si me hiciera cosquillas en el corazón. Me mantiene con la vitalidad de un recién nacido. Es adorable recibir los mensajes de ternura y de amor de tus seres queridos, la pregunta es ¿los respondes con la misma devoción? esa es la pregunta clave para que el mundo ruede como tiene que ser. Dicen por ahí que el mandamiento mayor es AMARA A LOS OTROS COMO A TI MISMO.
¿Qué te parece si empezamos por amarnos a nosotros mismos? Cuando empieces contigo mismo lo habrás hecho con el mundo. SUERTE.
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